Este gran desconocido para muchos se encuentra en pleno centro de A Guarda y realmente se trata de una fortaleza militar del siglo XVII. Multitud de veces que hemos visitado A Guarda y desconocíamos la existencia de esta joya de la historia...
Aunque situado relativamente a poca altura, desde él tenemos unas hermosas vistas a toda la villa y su puerto marinero, incluso se puede divisar el río Miño, aprovechando los muros y garitas que sobresalen.
La zona exterior fue acondicionada con un bonito paseo empedrado serpenteante para facilitar el acceso a su puerta de entrada; lamentablemente la última vez que fuimos, el pasado mes de Enero, la vegetación ya invadía por zonas el camino.
Su nombre se debe a don Álvaro de Bazán marqués de Santa Cruz de Marcenado que era capitán general de la Marina Española.
Fue construido en 1663, cuando las tropas portuguesas ocupaban el castillo de San Lorenzo de Goián, y se emplearon piedras de las antiguas murallas de la villa para hacer más rápida su construcción.
Cuenta con 4 baluartes llamados de Santa Tecla, A Guía, Santa Cruz y San Sebastián y dentro del recinto había una capilla, cuartel, cuadras, almacenes, polvorín, carnicería y entre otras dependencias estaba la casa del gobernador; también cuenta con dos puertas de entrada, la <Porta de Socorro> y <Porta da Vila>
Durante la Guerra de Independencia entre España y Portugal (1640-1668), el gobernador militar portugués D. Francisco de Sousa Conde de Prado e Estribero ordenó al general de artillería D. Fernando de Sousa Coutinho atacar la zona sur de Pontevedra con más de mil soldados. Las tropas entran por Goián, llegando hasta A Guarda donde asedian el castillo y tienen que rendirse sus ocupantes por falta de munición.
El Castillo fue vendido por el Estado Español en subasta por parcelas en el año 1860, siendo propietario (entre otros) don Angel González Sobrino que restauró las murallas y modernizó la zona interior.
Las dependencias del castillo tuvieron muchas finalidades, desde ser punto de reuniones políticas del general Primo de Rivera, hasta albergar una fábrica de embutidos y después una de loza y cerámica de nombre "La Santa Cruz" cuyo propietario era d. Juan A. Lomba Alvárez que era proveedor de La Casa Real.
Aprovechando estas viejas dependencias se construyó recientemente el Centro de Interpretación que podemos observar hoy en día.
En el año 1995 fue declarado Bien de Interés Cultural pero lamentablemente parte de sus murallas ya habían desaparecido siendo aprovechadas para otras construcciones.
Tras muchos años en el olvido, el Concello se hace con su propiedad y por fín en el año 2014 tras su puesta en valor se abre al público para poder visitarlo. Eso sí, ojo que tiene horario!!
Cómo llegar:
No hay comentarios:
Publicar un comentario